Una nueva network internacional para académicos y prácticos de la justicia penal
Al inicio de una nueva aventura, algunas palabras introductorias a Criminal Justice Network
Una de las cosas más bellas que puede ocurrir durante la vida profesional de un académico es tener la posibilidad de compartir las propias ideas con colegas y amigos de todo el mundo. Yo mismo he tenido la fortuna de probar más de una vez esta extraordinaria experiencia, habiendo sido invitado a participar en conferencias y seminarios en diversos países, en particular en España y América Latina – lugares en que obstinadamente me expreso en una mezcla entre italiano y español, la cual desarrollé durante mis años como estudiante de doctorado en Múnich, periodo en que pude conocer a numerosos jóvenes colegas hispanoparlantes.
En los últimos años he pensado, más de una vez, en lo maravilloso que sería tener más oportunidades de discusión y reflexión con mis colegas internacionales. Por supuesto, existen varias revistas jurídicas, del mas alto prestigio, donde cada uno de nosotros publica sus trabajos. Pero cada profesor, me temo, se da cuenta de la dificultad de mantenerse actualizado con el material que se publica en el extranjero, incluso por sus amigos más cercanos. Nuestras universidades a menudo no cuentan con los recursos necesarios para adquirir las revistas extranjeras más importantes – y nuestras vidas son, de todos modos, demasiado ocupadas para permitirnos estar siempre informados sobre lo que se publica, por ejemplo, en Alemania, España, Estados Unidos o Chile, solo por mencionar algunos de los países en los cuales los colegas que más admiro publican habitualmente sus trabajos.
De estas reflexiones surgió la idea de crear una página web que pueda ser un espacio común de debate para penalistas de todo el mundo, y que al mismo tiempo constituya un instrumento para diseminar los resultados de sus investigaciones. Inicialmente compartí esta idea con un grupo de colegas y amigos italianos – Gian Luigi Gatta de la Università degli Studi di Milano; Luca Luparia de la Università di Roma Tre; Guglielmo Leo, vicedirector de la Escuela Superior de la Magistratura –, quienes han trabajado por largo tiempo conmigo en otra revista on-line, Diritto penale contemporaneo, la cual fundamos el año 2010 junto a Luca Santa Maria. Esa experiencia ha sido sorprendentemente exitosa: la revista, dirigida esencialmente a académicos y prácticos del derecho penal en Italia, registra hoy un promedio de 150.000 visitas al mes. Debemos crear, ahora, algo análogo para una audiencia internacional.
Otros dos colegas italianos – Francesco Mucciarelli, de la Università Bocconi, en la cual yo mismo me desempeñaba como profesor hasta antes de mi reciente nominación como juez constitucional, y Antonio Gullo, de la Università Luiss de Roma – junto a algunos profesores de la Universitat de Barcelona – Joan Queralt, Jaume Alonso-Cuevillas, Sergi Cardenal, David Carpio – y de la Universidad Diego Portales, Santiago de Chile – Jaime Couso, Héctor Hernández, Mauricio Duce, Fernando Londoño – entusiastamente se sumaron a nuestro proyecto, el cual, además, nuestras respectivas universidades aceptaron apoyar.
Una de las primeras cuestiones que nuestro pequeño grupo de miembros fundadores tuvo que resolver fue el idioma que debíamos elegir para nuestra iniciativa. Para un sitio internacional, el inglés obviamente habría sido la opción por default. Sin embargo, de inmediato estuvimos de acuerdo en que sería una lástima renunciar a priori a nuestros propios idiomas, en los cuales cada uno de nosotros se siente más cómodo al hablar sobre cuestiones jurídicas. Por otra parte, también consideramos que actualmente la mayoría de los académicos lee textos en idiomas extranjeros. Esto es particularmente cierto en el área que va desde Italia a la Península Ibérica, y de allí a América Latina – un inmenso territorio en el cual los idiomas están tan cerca los unos con los otros, como para permitir a un profesor italiano ser fácilmente entendido en Guatemala o en Brasil, incluso sin haber tomado previamente, como en mi caso, una sola clase de español o portugués.
Decidimos, por tanto, concebir nuestro proyecto como un foro multilingüe, donde todos cuenten, en principio, con la posibilidad de expresarse en alguno de los idiomas que resultan más familiares para los profesores de derecho penal. Estructuramos entonces nuestro sitio web en tres distintas versiones – en inglés, italiano y español –, manteniendo, no obstante, la puerta abierta a contribuciones en otros idiomas importantes en la discusión internacional, como el francés, el alemán y el portugués.
En la fase inicial de este proyecto hemos tenido la fortuna de sumar un grupo verdaderamente notable de profesores de diversos países (Italia, España, Chile, Alemania, Francia, Argentina, Estaos Unidos, Perú, Grecia, Portugal, Suecia, Reino Unido, Uruguay), todos con fuertes relaciones internacionales y con los cuales hemos ya trabajado en el pasado.
Finalmente, nuestro Criminal Justice Network ha salido a la luz y podrá comenzar a operar.
Cada tema potencialmente interesante para un público internacional de expertos en las ciencias penales podrá ser discutido en nuestro network. Solo por mencionar algunos ejemplos, podremos discutir acerca de cómo conciliar la necesidad de una lucha eficaz contra la criminalidad organizada y el respeto de los derechos reconocidos en las constituciones nacionales y en las cartas internacionales de derechos humanos; sobre cómo construir formas de responsabilidad de la persona jurídica por hechos que involucran tanto la responsabilidad de los individuos como la responsabilidad de la organización; sobre cómo asegurar una eficaz lucha contra la corrupción y la criminalidad de los negocios a través de las herramientas penales “clásicas”, estrategias preventivas e instrumentos de recuperación de ganancias ilícitas; sobre cómo regular las técnicas de investigación penal a la luz de las nuevas tecnologías, las cuales, junto con poseer una mayor potencialidad de acreditación fáctica, involucran el riesgo de incidir profundamente en los derechos fundamentales de las personas; sobre cómo resguardar los principios tradicionales del proceso penal en relación al fenómeno de la justicia negociada; sobre cómo asegurar, incluso en tiempos de “populismo penal”, que las penas privativas de libertad operen como instrumento de resocialización del condenado y se respete su dignidad. Por supesto, estamos seguros de que muchos otros tópicos prontamente serán añadidos a esta lista.
Para discutir todas estas cuestiones hemos creado en nuestra home page un blog dedicado, en principio, a breves e informales entradas que – por ejemplo – comenten nuevas sentencias o leyes, o que simplemente planteen nuevas ideas. Otro tipo de contribuciones serán bienvenidas, como working papers o textos de conferencias que los respectivos autores deseen compartir con un público más amplio antes de transformarlos en propios artículos, pudiendo tener en cuenta posteriormente los comentarios y críticas recibidas en el blog. Estos materiales no serán sometidos a un proceso de peer review, sino que serán simplemente examinados por nuestros managing directors con la finalidad de verificar su potencial interés para los lectores del sitio.
Por otra parte, hemos decidido incorporar en nuestro sitio web un área especial para el ya existente e-journal Diritto penale contemporaneo – Rivista trimestrale, que hemos transformado en el entretiempo en una revista jurídica internacional (y multilingüe), dedicada a la publicación de artículos sometidos a un procedimiento de peer review conforme a los estándares internacionales.
También hemos creado una sección especial dedicada a la publicación de e-books de libre acceso, así como de videos de eventos internacionales, entrevistas, etc., todos de potencial interés para nuestros lectores.
Y, naturalmente, los lectores podrán ser periodícamente informados de todas las nuevas publicaciones en Criminal Justice Network y en la revista trimestral, inscribiéndose en el servicio newsletter, disponible haciendo click en la palabra correspondiente en el menú en la parte superior de la homepage.
Me parece conveniente detener aquí nuestra presentación. Después de todo, bien sabemos que el éxito de esta iniciativa dependerá enteramente de nuestros lectores, y de su disposición a convertirse ellos mismos en autores, participando activamente en nuestras discusiones y proponiendo nuevos temas de debate a través de sus post y artículos. Esperamos sinceramente que Criminal Justice Network pueda contribuir a hacer más accesible los resultados de nuestras investigaciones al público internacional, y a reforzar las relaciones científicas y personales entre los académicos y prácticos de la justicia penal, más allá de nuestras fronteras nacionales.